Muchos de los elementos que por tradición integran la cultura están en crisis. La decadencia de la filosofía es particularmente llamativa: por un melentendido afán de rigor se ha ido apartando del lenguaje y preocupaciiones del hombre de la calle. También ha olvidado que su cometido era mantener vivo el interés por las preguntas que no podemos dejar de formular ni acabar de responder, e impedir que deriven hacia lo trivial las otras, las que nos salen al paso cada día.
Edición | Editorial | Páginas | ISBN | Observaciones |
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2005 | Biblioteca Nueva |
123 |
Prologado por el profuso pensador Antonio Ariza |
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Este libro recoge retazos del vivir cotidiano bajo la perspectiva de un gran filósofo. Sirve para vivir y entender un poco lo que pasa.