Un barco cargado de arroz

Hay novelas policíacas que son puro entretenimiento, sin pretensiones literarias. Las hay que intentan algo más: reproducir un ambiente, una ciudad o unos personajes. El paradigma de las primeras es Agatha Christie; esta autora hizo célebres a sus investigadores y siempre defendió que una novela de misterio no debía exceder de determinada extensión. Por este procedimiento fue extraordinariamente prolífica.

En la misma línea, las novelas de Simenón y el inspector Maigret, además de ser correctas en cuanto a la trama con pocos trazos representan a París y la personalidad entrañable del inspector. El lector de las novelas de Lorenzo Silva sabe que el mayor atractivo de éstas reside en la persona del Brigada Bevilaqua y de sus compañeros investigadores.

"Un barco cargado de arroz" gira alrededor de la inspectora Petra Delicado, una policía de carácter fuerte y en ocasiones inestable, que se complace en pugnar con su colaborador, el subinspector Fermín Garzón. Ellos son los protagonistas y la autora se complace en hacerlos actuar, tanto en la esfera policial como en su vida privada. La ciudad de Barcelona es bastante marginal en la novela e incluso podríamos decir que lo son las víctimas y los propios delincuentes: tienen poco interés.

Como el lector perspicaz ya habrá adivinado el barco cargado de arroz no juega ningún papel en la novela.