Un juez retirado cita, para hablar de su testamento, a sus dos hijos, uno de ellos profesor de Derecho y el otro alcohólico y drogadicto. Al llegar, el profesor encuentra muerto al anciano y descubre fortuitamente unas cajas llenas de dinero, mucho más del que un juez puede ganar con el ejercicio honesto de su profesión. Escrita con estilo sencillo y desarrollada con fluidez, la novela distrae y entretiene.
Comentarios
Por un lado, el autor, John Grisham, es, si se permite la expresión, un narrador de raza; y por otro, la novela, a través de la ficción, retrata con exactitud el cerrado ambiente sureño de las poblaciones pequeñas de Estados Unidos. A lo largo de la narración va reflejando el ambiente sureño, donde, por ejemplo, la religiosidad es importante y donde todavía existe el racismo.
Los personajes están bien definidos y con una gran riqueza de matices.
A través de distintos personajes manifiestan actitudes, favorables o desfavorables, hacia el comportamiento ético, el soborno y el divorcio, por ejemplo.
Las relaciones familiares de los protagonistas están llenas de sutilezas que hacen especialmente creíbles a sus personajes.
En resumen, estamos ante un buen trhiller con un doble misterio que se lee con verdadero interés. El largo desenlace, apasionante, se inicia en la página 341 y acaba en un final abierto que prolonga el interés por el futuro de los protagonistas. El lector tiene asegurado pasar un verdadero buen rato con la lectura de “La citación”.