"Un viaje literario y filosófico por tres momentos claves de la civilización occidental", así podríamos resumir esta fabulosa novela histórica en la que Iain Pears nos relata tres historias de tres hombres en tres diferentes épocas que marcaron la humanidad. Por un lado está Manlio Hipómanes, un aristócrata galo obsesionado con la conservación de la civilización romana durante la caída del Imperio Romano en el siglo V, Olivier de Noyen, un poeta al servicio de un poderoso cardenal envuelto en una trama para restaurar el papado en Roma, cuando surgió la peste Negra en el XIV y Julien Barneuve, un intelectual descontento que se une al gobierno de Vichy en la II Guerra Mundial. Estos tres personajes a parte de estar enamorados de la misma mujer, están unidos por un mismo texto clásico: 'El sueño de Escipión', una obra de neoplatonismo que plantea cuestiones filosóficas para cualquier época incluso hoy en día.
Es una obra muy entretenida en la que el lector quedará atrapado ya desde el comienzo, muy bien narrada y muy amena, no solo por la forma de contarla sino también por el misterio que rodea a cada una de las historias, que por cierto ha conseguido una combinación casi perfecta entrelazando y uniendo estás tres historias de épocas tan distantes y a primera vista sin nada en común. Iain ha demostrado que hoy por hoy es uno de los mejores novelistas históricos del momento
Edición | Editorial | Páginas | ISBN | Observaciones |
---|---|---|---|---|
2003 | Seix Barral |
557 |
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2006 | Seix Barral |
560 |
978-84-322-9624-6 |
Edición de Bolsillo. Primera edición de 1999 |
Comentarios
Ian Pears con su habitual maestría desarrolla una magnífica obra de novela histórica, bien ambientada, sólida, con temas de fondo: cuestiones del platonismo y su concepción de la vida. Su lectura. como en el caso de la "cuarta verdad", es creíble. Se aprende historia del pensamiento. Alguna decripción puede ser más fuerte, pero se ve venir. (Expuesto por aita)
Apunta alto... pero no convence. Además, la visión que se desprende del hombre y del Cristianismo es muy negativa... pero no porque se haga una crítica profunda, sino por la abundancia de tópicos burdos sobre los cristianos y los presuntos "errores" históricos del Cristianismo.