Una dama extraviada
Marianne Forrester, esposa de un pionero del ferrocarril,
anfitriona de la única casa elegante de la triste población de Sweet
Water, siempre alegre en la riqueza y siempre resistente en la penuria,
pasa de ser una gran señora a una mujer señalada por todas las
habladurías. Un joven que la adora acaba despreciándola, y sobre su
relación construye la autora un espléndido ejercicio sobre los
entresijos de toda idealización.
Ediciones
| Edición | Editorial | Páginas | ISBN | Observaciones |
|---|---|---|---|---|
| 2002 |
206 |
|
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Una narración de calidad,
Una narración de calidad, buena literatura, capaz de mostrar los entresijos de la mente y sensibilidad de una dama, gran mujer y gran anfitriona, en la mejor casa del pueblo de Sweet Water, cuando se levana el ferrocarril en las tierras profundas del Oeste americano. Sólo un amujer como Cather puede entrar en los entresijos del corazón femenino. Una mirada humana y humanizada, en lo próspero y en lo adverso.
Hasta hace bien poco, Willa Cather (1876-1947) era prácticamente desconocida en nuestro país, algo realmente incomprensible si pensamos que la estadounidense es una de las más grandes escritoras en lengua inglesa de todos los tiempos. Afortunadamente, la publicación en España de obras como "Mi Ántonia", "Mi enemigo mortal" o "La muerte llama al arzobispo" ha contribuido a llenar este vacío. Ahora llega a las librerías "Una dama extraviada", otra joya de Willa Cather, mujer activa y, como muchos de sus personajes, pionera (fue viajera, periodista, maestra, vivió durante cuarenta años con su compañera, Edith Lewis...). En esta última novela nos presenta a Marianne Forrester, esposa de un pionero del ferrocarill y anfitriona de la única casa elegante de la triste población de Sweet Water. Siempre alegre en la riqueza y siempre resistente en la penuria, Marianne pasa de ser una gran señora a una mujer señalada por todas las habladurías.