Calix

Una novela seria que va enlazando la Roma de los primeros cristianos perseguidos con la época actual, a partir del final del franquismo. Aparecen los nazis, que se quieren hacer con el Cálix, ofrecido por sus afines de Falange, de la que ya Franco se había distanciado. Lugares importantes en el trayecto del Cálix son Roma, san Juan de la Peña (Huesca), Zaragoza, Valencia, etc. Los saltos en el tiempo dan agilidad a la novela pero invitan a no dejarla muchos días porque se pierde el hilo.

Es novela, pero es historia por la documentación que subyace al relato, a fin de no inventar el fondo del asunto. Y es que el Santo Cáliz que se venera en la catedral de Valencia, tiene a su favor muchos hechos y documentos para poder aventurar que es el mismo utilizado por Jesús en la última Cena. Por otra parte, el personaje Antolín, que busca el Cáliz para impedir que sea robado, es uno de esos hombres sin aparente importancia pero decisivos a la hora de solucionar problemas que le superan. Es la grandeza de la gente corriente. A ellla se ha dirigido principalmente Quien utililzó el Cálix por primera vez.

Buena novela -opera prima- de un autor que no es ningún novel porque es un estudioso de la literatura. He de reconocer que el tema no me resultaba atractivo porque resulta cansina la insistencia y confusión entre lo mistérico y el misterio verdadero que ha proliferado tanto estos años en libros de medio pelo. Sin embargo este libro es distinto porque tratándose de una trama inventada sirve para explicar una realidad histórica muy probable, con elementos históricos entremezclados con otros ficticios, pero sin abusar ni mezclar. Está bien escrito, es ameno y tiene su enganche. Parece floja la historia de amor, se desaprovechan momentos de tensión (el martirio, copiado de las Actas de los mártires), algún pasaje resulta prolijo en expliaciones y algún otro es confuso. Pero merece un aplauso , porque es un buen trabajo y da la impresión de que el autor tiene madera para hacer cosas más atrevidas.