La Villa del Libro

Villa medieval. Cinco
hectáreas. Doscientos sesenta habitantes. Vida rural. Diez
librerías. Repito, diez librerías. Libro viejo, libro
jurídico, infantil, arte, teatro. Una iniciativa por la que un pueblo
vallisoletano, Urueña, se ha convertido en
Villa del Libro. Debo reconocer que la iniciativa de la Diputación
de Valladolid de convertir un pueblo que vive de las explotaciones
agrícolas en centro cultural con repercusión nacional me ha
llamado agradablemente la atención.

Allí
se han establecido editores, libreros, amantes de la cultura, todos unidos con
la intención de crear en Urueña un
centro cultural único. El pueblo tiene un entorno privilegiado, un
altozano amurallado, iglesia, campo por todas partes, excelente
gastronomía; una historia que nos remite a lo más
recóndito de nuestra historia, la historia de Castilla.

Realmente,
en las condiciones en las que nos movemos en cuanto a capacidad de comunicarnos
a través de este medio, internet, hacen que
iniciativas como esta no necesiten que el entorno directo en el que se
establecen las librerías sea necesariamente lector. Sin embargo felicito
a este pueblo, porque a veces el progreso nubla nuestra perspectiva de las
cosas y no deja ver que el libro sigue siendo el transmisor de cultura por
excelencia. Muchos pueblos, por ejemplo, de los alrededores de Madrid, con
muchos miles de habitantes, cientos de miles, no pueden presumir de tener
tantas librerías en su haber.

Cierto
es que esta iniciativa se enmarca en una estrategia de promoción de la
comarca, pero a su favor tiene, aparte de cuestiones patrimoniales, el hecho de
que el instrumento elegido haya sido el libro en toda su extensión,
desde su planteamiento editorial a su conservación. Creo que un foro
como el Club del Lector tiene motivos para alegrarse de que haya quien
todavía cree en el libro como lo que es, un transmisor de cultura y no
solo un objeto de márketing.

Carlos Segade

Profesor del Centro Universitario Villanueva

Para leer más:

http://www.diputaciondevalladolid.es/villadellibro