El trabajo que ahora presenta José Luis González Gullón
investigador de Historia de la Iglesia Contemporánea de la Universidad de
Navarra, es una completa monografía
sobre la formación, extracción, distribución e influencia del clero de la
diócesis de Madrid durante el convulso período de la Segunda República.
El tema abordado es de un gran interés pues apenas
existen investigaciones de archivo seriamente documentadas y debidamente
enmarcadas en el clero secular de la época. Elprof. González Gullón ha sabido abstraerse del problema de
la cuestión religiosa de las Cortes Constituyentes y del anticlericalismo
reinante, que suelen ofuscar a los investigadores en infinitas cuestiones de
detalle.
Tanto por la metodología utilizada, como por la claridad
del análisis hace de este trabajo un ejemplo para seguir en otras diócesis
españolas. El resultado final demostraría cual era realmente el clero español y
su influencia en la
Segunda República. Se podría arrojar así luz
sobre la persecución religiosa en la Segunda República
y en la guerra civil y se abandonarían muchos lugares comunes e interpretaciones en boga.
Los datos que aporta esta monografía son claros: un clero
bastante bien formado (90 doctores sobre 500 sacerdotes diocesanos); de una
media de edad de 50 años (p.65); bastante sano espiritualmente (p.66); con un Seminario
de nueva planta y bien organizado (pp. 144-145) y, finalmente, un clero
dedicado seriamente a la cura de almas (pp. 187-199).
El problema estribaba, por una parte en la llegada
incontrolada de clero extradiocesano (pp. 64 y ss), y a la vez la mala distribución de ese clero.
Efectivamente de las 29 parroquias de la capital, 17 estaban ubicadas en el
centro, 7 en el Ensanche y 4 en la periferia (pp. 146-150). Es decir la oferta
sacerdotal escaseaba en los barrios donde había más necesidad de caridad y de
asistencia espiritual aunque intentase subsanarse con labores asistenciales y
benéficas (pp. 165-167).
Respecto a la cuestión social y la pérdida de las masas
obreras señala el autor: "Para entender mejor la acción social del clero en
Madrid durante la
Segunda República, hay que tener en cuenta al menos cuatro
aspectos: la formación previa que habían recibido, su presencia en el
extrarradio, la reflexión de los sacerdotes acerca de la cuestión social, y el
papel del presbítero en los sindicatos católicos" (p.250). La conclusión, después
de un detenido estudio (pp. 255-263) es la siguiente: "Sólo unos pocos
presbíteros hicieron autocrítica pública sobre la deficiente relación del clero
con esa parte de la sociedad" (p.425).
Por otra parte esta investigación muestra la falta de
impulso de la
Acción Católica, y por lo que se refiere a la juventud: "A
pesar de las ofertas asociativas, todavía fueron muchos los jóvenes a los que
la Iglesia no llegó en los años republicanos" (p.247).
José Carlos Martín de la Hoz
José Luis GONZÁLEZ
GULLÓN, El clero en la
Segunda República. Madrid 1931-1936,
ed. Monte Carmelo, Madrid 2011, 483 pp.