Representar la existencia

 

La literatura y, en especial, la novela es un género artístico de primera magnitud pues en ella, como en toda obra de arte, el autor refleja la vida y las obras de Dios y de los hombres con tal belleza y profundidad que el lector se siente trasportado a vivir esa misma realidad descrita y notar cómo sus reacciones se desencadenan infinitamente para producir una especial paz y gozo y otras pasiones, dependiendo del género literario y de la intencionalidad del autor y de las circunstancias y formación del lector, en especial de su categoría espiritual.

El famoso catedrático y ensayista Thoma Pavel (Bucarest 1941) profesor de historia de la literatura universal afincado en la Universidad de Chicago, en Estados Unidos, ha realizado un proyecto verdaderamente muy ambicioso. Ha logrado realizar un análisis crítico de la literatura, fundamentalmente de la novela, desde el medievo hasta nuestros días.

El resultado que tiene el lector en sus manos, ha resultado ser verdaderamente enciclopédico pues ha logrado recoger, en gran parte, sus intensas y extensas lecturas y resumirlas en apenas un volumen de 400 páginas y, además, de modo asequible para lectores cultos.

Lógicamente, los resultados podrán ser apreciados en mayor o menor medida según el grado de cultura y de lecturas que posea el lector, pues son tantas y tan variadas las posibles conexiones que resulta imposible estar realmente al nivel del autor de esta monografía. Pero, en cualquier caso, las ideas están suficientemente expuestas como que cada uno llegue a quedarse satisfecho.

Es muy interesante el resumen que hace el profesor Pavel de su propia obra casi al final de la misma: “como ya he advertido, esa imagen del autor como ser locuaz, omnisciente y a veces inoportuno solo es necesaria en el momento histórico en el que, con la complicidad de los escritores sensiblones, los protagonistas de la novela se expansionan en primera persona acerca de la incomparable belleza de su alma; en otras novelas, no obstante, una voz aún más fuerte pone en su sitio a esos sublimes habladores” (379).

Aquí está la clave de esta magnífica obra de arte que describe, a lo largo de la historia de la literatura, a mostrar que el arte es un diálogo entre la sensibilidad del escritor para narrar hechos e historias, auténticas o inventadas, reales o imaginarias y la sensibilidad del lector que capta el mensaje y desencadena sentimientos, afectos y realidades que enriquecen y transforman: “yo separaría con cuidado la cualidad de gran escritor de la de autor importante. Y en el interior de esas dos categorías realizaría una diferenciación por grados. Entonces sería posible observar que grandes escritores han tenido poca influencia y que los autores de inmensos descubrimientos no siempre han tenido el mejor gusto ni el mayor talento” (380).

José Carlos Martin de la Hoz

Thomas Pavel, Representar la existencia. El pensamiento de la novela, Crítica, Barcelona 2024, 407 pp.