Este libro es, probablemente, un libro de amor. De amor, caballos, héroes discretos y un perro muy pequeño. Un libro que quiere y trata de hablar de amor, pero que habla de otra cosa.
Y al hablar recorre esa inquietante línea que separa el amor de la supervivencia, los errores de los aciertos; la verdad, de la más absoluta de las mentiras.
Y al hablar hila pausadamente una historia pequeña que –desapercibida– embriaga, entristece y mata.