Es la carta que escribe un amigo a otro amigo, pidiéndole perdón por no haber sabido defender su amistad, con gestos externos, en un momento determinado de su vida por el hecho de ser judío. En la carta el personaje principal expresa lo que supuso para él una amistad que terminó con una falta de reconocimiento por su parte y lo mucho que se arrepiente de haber sido valiente en un momento que, para cualquier amigo, es crucial. En el fondo el mensaje del personaje es un elogio al amigo al que le quiere expresar la siguiente idea: que bueno que tú existas.