" Tengo curiosidad por la curiosidad " , así arranca este texto admirable en el que Alberto Manguel, guiado por una galería de pensadores, escritores y artistas, indaga en el que ha sido desde la noche de los tiempos el estímulo que impulsa nuestro conocimiento y también la tentación para adentrarnos en lo prohibido, lo oculto, lo peligroso.
Una de las primeras frases que pronunciamos como niños es " ¿por qué? " . Una vez aprendida la pregunta, nunca dejamos de formularla, aunque muy pronto descubramos que la curiosidad rara vez es recompensada con respuestas reveladoras.