Un chico holandés de quince años, Rudolf Hefting, es transportado mediante un alocado experimento al año 1212. Un error de cálculo lo sitúa en medio de la Cruzada de los Niños. Una vez allí, Rudolf se da cuenta de que ¨era más fuerte, sabía más y era más hábil que cualquiera¨ de los niños que componían la Cruzada; ¨además, parecían impresionados por su complexión y por su seguridad¨, por lo que Dolf decidió explotar sus ventajas y convertirse en el conductor de aquella expedición. Atraviesan media Europa hasta las costas de Italia, sufren la peste, participan en algunas batallas...