Poemario de gran belleza en el que el poeta leonés Antonio Colinas vuelve, con nuevos matices, a sus temas de siempre: la búsqueda de lo sagrado en lo cotidiano, el regreso a lugares y circunstancias del pasado, la gratitud hacia personas que han influido en su vida, una poderos llamda a la interioridad y a la trascendencia.