Las memorias del autor, nacido en Estambul y afincado en Inglaterra, forman un interesante relato testimonial de la violenta crisis sufrida por Turquía a raíz de su derrota en la guerra y la caída del imperio otomano. El tono directo y realista del estilo le presta viveza y verosimilitud, sin perder por ello una grata discreción en cuestiones de carácter íntimo. La acción, ágil y variada, demuestra unas dotes naturales de narrador muy notables.