Brighton Rock

Afortunadamente este autor, considerado como uno de los mejores en la novela policíaca, tiene un buen editor español que está sacando a la luz todas sus obras. Se trata de la “Biblioteca Graham Greene” que, con pulcritud viene editando Edhasa desde hace años. Graham Greeen es un autor converso al catolicismo aunque la fe cambió más su cabeza que su corazón. Él mismo vivió en constantes contradicciones obsesionado por temas como la salvación eterna, el valor de la confesión y una extraña obsesión por la sexualidad atormentada que aparece en varias de sus obras.

Brighton Rock está considerada junto con El poder y la gloria una de sus mejores obras. Es la historia de un delincuente de pacotilla, católico por formación, que aspira a liderar a una banda de gángsteres. Para encubrir un asesinato Pinkie, personaje absolutamente detestable, acaba casándose con una joven camarera que lo quiere de verdad. Ella es el auténtico antagonista. Frente al cálculo vil, se alza el amor de esa joven dispuesto a seguirle hasta el infierno. La escena en que él le pide que le acompañe al suicidio es de una tremenda fuerza narrativa y muestra el poder del mal para conducir por la vía de la degradación hasta el nihilismo.

Greene volcó en esta obra parte de sus angustias a las que nos acostumbró en casi todas sus obras, especialmente el deseo de la salvación eterna. Por medio anda también la idea de la posible redención que acompaña al antihéroe de esta novela a lo largo de todas las páginas: la posibilidad de un acto de contrición perfecto.

Junto a una muy bien tejida trama Greene nos introduce en las profundidades del alma humana y del misterio de la gracia pero, como es habitual en él, no logra abrirnos a la esperanza. Autor atormentado que nos ha dejado grandes obras en las que un género, aparentemente menor, como la novela policíaca, alcanza los niveles más altos de reflexión, Greene no puede dejar de leerse.

(Juan Hernández, en www.forumlibertas.com)