Selina Bruce abandona repentinamente a su prometido, un pulcro abogado que junto con su jefe administran el patrimonio de la abuela de Selina, que luego pasará a ella.
Seline no conoció a su padre pero tiene una foto muy antigua de él.
Su prometido le regala un libro y al ver la foto del autor, Selina se queda anonadada: es casi idéntica a la que tiene de su padre por lo que piensa que puede ser él ya que ademas las iniciales de ambos coinciden.
Selina se entera por la editorial del paradero del autor que resulta ser una pequeña isla española del Mediterraneo y decide viajar a conocerlo.
Comentarios
Novela de escaso contenido, bastante simple de argumento y escaso peso de los personajes.
Parece necesario resaltar el estupor de este lector al ver la hispanofobia de la protagonista en lo que la autora la hace insistir machaconamente:al aterrizar en Barcelona dice que los funcionarios huelen a ajo, los Guardias Civiles son bruscos y serios, nada amables,los españoles que estan en el aeropuerto son horteras y paletos, le roban el bolso en la terminal cortandolo con una cuchilla, se pierde su maleta que vuela a Madrid y nadie la ayuda, los taxistas son interesados, gritones y faltos de educación y cortesía. En fin, un cromo.
Como siepre se puede sacar algo positivo todo, hay que decir en favor de la autora que en la situación en la que se encuentra Selina al llegar a la isla, muy propicia para todo tipo de situaciones truculentas, la descripción de ellas es limpia.