Tras someter al país de Bellandra y matar a su monarca, el rey Kared regresa a su tierra con una espada mágica y dos regalos para su hija, la princesa Torina: una esfera de cristal, en la que ella puede ver el futuro, y un esclavo, Landen, el príncipe destronado. Pero la niña libera al muchacho y nace así una amistad muy especial, que provocará tragedias y alegrías y marcará la vida de mucha gente para siempre.