La vista desde Castle Rock

La escritora canadiense está considerada por muchos como la mejor narradora norteamericana de nuestros días. Las historias autobiográficas, reconstruyen la historia de sus antepasados. Cada generación de su familia, había producido un escritor, que quería dejar su señal en el tiempo. Los personajes aparecen como fogonazos de luz, sólo para dar brillo a la figura del padre. El personaje que destaca por soñador y romántico en un mundo de granjeros austeros y taciturnos granjeros presbiterianos. Son historias que en ocasiones empiezan por el final, o que dejan una parte en blando para que juegue la imaginación del lector. Parece que quiere transmitir sencillez tanto en los personajes como en las situaciones. El estilo recuerda a Flannery O'Connor. Las frases son en ocasiones demasiado rebuscadas, le cuesta expresar lo evidente y lo sencillo. La idea es buena pero le falta un toque de genialidad.