Las lágrimas de Hemingway

Historia magníficamente ambientada en las fiestas de San Fermín de Pamplona. Toca con algún detalle todos los momentos más significativos de los sanfermines, unos más conocidos que otros: el encierro, la procesión del santo, los fuegos artificiales, las corridas de toros. La ambientación de esos días está muy conseguida cuando se describen las calles abarrotadas de gente o se desarrollan las escenas en el Café Iruña en el Hotel La Perla. Para mí es lo más conseguido de la novela. Al hilo de estas fiestas, hay un constante recuerdo de Hemingway, gran promotor de ellas en sus escritos.

Comienza con la muerte de un corredor del encierro por asta de toro en circunstancias extrañas. El inspector Juan Iturri y Lola MacHor lograrán desentrañar el enigma, no sin tener que superar abundantes dificultades e incógnitas. En este contexto, se introduce otra referencia literaria, esta vez Conan Doyle y sus historias de Sherlock Holmes.

Novela muy bien escrita, recomendable para los amantes del género policíaco.

Quizá el ritmo puede resultar algo lento y la trama un poco rebuscada. El perfil de los malos, quizá resulte algo exagerado, pues parecen demasiado malos e incompetentes.