Orgullo de corazón

Susan Gaylord siente una pasión artística a la que no puede ni quiere renunciar. Su primer esposo Mark y el segundo Blake, siendo muy distintos entre sí, ven un obstáculo para el matrimonio en la afición de Susan por la escultura. Para Mark lo lógico es que su esposa se quedara en casa, en tanto que Blake la ve como un objeto hermoso para lucir. Pese a su interés por compatibilizarlo todo Susan fracasa en sus dos matrimonios.

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1989 Plaza y Janés
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Susan Gaylord es una joven que vive en una pequeña ciudad americana. Contrae matrimonio con Mark y tienen dos hijos. Susan debería ser como cualquier otra esposa, centrada en su casa y en su marido, pero tiene facilidad para la escultura y realiza algunos trabajos. Mark es un hombre sencillo que no comprende la vocación artística de su esposa y se siente empequeñecido ante ella. Pero Mark muere joven y Susan contrae matrimonio con Blake, rico, con una personalidad atractiva. A ella le agrada ser la bienamada de su esposo, con el que vive un periodo de intensa pasión. Pero algo le hace recordar que no puede renunciar a la mitad de su vida, a su arte. Diversas circunstancias los van separando hasta que él la abandona. El libro compara tres tipos de mujer: la señora Gaylord, madre de Susan, que no tiene más horizonte que su casa, su marido y sus hijas; Mary, hermana de Susan, mujer independiente que desprecia el matrimonio y no dará un solo paso, incluso casarse, si no es buscando su propio interés; y Susan, que quiere tenerlo todo: familia, ser una esposa amada y desarrollar su vocación artística. La incomprensión del primer marido y el divorcio del segundo dejan flotando en el aire la pregunta sobre si ello es posible. La novela es demasiado compleja para no pensar que tiene algo de autobiográfica. No sabemos en qué año fue escrita, pero en la actualidad las situaciones en las que puede verse una mujer, en su doble faceta familiar y profesional, son mucho más variadas; no se reducen a las tres posibilidades citadas. Nadie duda hoy de que una mujer pueda tener una familia y desarrollar al tiempo su vocación profesional o artística. Es una buena novela de Pearl S. Buck, que esta vez abandona los relatos ambientados en China.