Perrock Holmes 13. A todo gasss

Episodio número trece de la colección “Perrock Holmes”, una serie entretenida con mucho suspense, aventura y grandes dosis de humor e ironía. Los protagonistas son Julia y Diego, investigadores del Myster Club, acompañados de Perrock, que puede comunicarse con sus dueños y detectar sentimientos en los humanos, y del gato doctor Gatson, capaz de hablar con Perrock y sus amos. En el primer episodio, publicado en 2017 y titulado “Dos detectives y medio”, el padre de Julia y la madre de Diego acaban de contraer matrimonio; los dos niños, de edades parecidas, no acaban de llevarse bien, así que los padres les regalan una mascota con el fin de suavizar sus relaciones. Ante el asombro de los niños, el cachorro, rescatado de una perrera, tiene la facultad de comunicarse con ellos y el poder de leer los pensamientos de todo aquel que le rasque la barriga, capacidad que lo convierte en un eminente investigador, aunque es travieso, ligón y un poco gamberro.  

En esta ocasión, Julia y Diego, junto a sus mascotas, viajan a Montecarlo como premio por haber sido los ganadores del campeonato “Piensa o Revienta”, un torneo de juegos de mesa.  En esta lujosa ciudad, entre yates y limusinas, van a disfrutar del Gran Premio de Fórmula I de Mónaco y se alojan en el ostentoso Hotel&Spa Caraquemada, un magnífico hotel de cinco estrellas. Allí, los recibe el mismísimo Nick Caraquemada, propietario del hotel y uno de los mejores pilotos de la Fórmula I de todos los tiempos, una leyenda viva. En la última planta del hotel, en el salón real, decorado todo de  cristal,  se guarda el gran trofeo automovilístico de ese año que desaparece aquella misma noche. ¿Quién ha podido robar la magnífica copa de oro a pesar de las cámaras y de todas las medidas de seguridad? Diego, un genio de la informática y de la tecnología, iniciará la investigación con Julia, Perrock y Gatson.

El autor de la serie es Isaac Palmiola que ha conseguido crear una colección de libros entretenidos,  con una buena dosis de humor e ironía. Como afirman los lectores, el éxito de la serie se basa en el ritmo narrativo ágil y en las situaciones de comicidad absurda. Los textos se completan con las divertidas ilustraciones de Núria Aparicio. Los dibujos, en blanco y negro, representan de forma significativa y con gracia tanto la fisonomía de los personajes como las acciones que se desarrollan a lo largo del relato.