A los trece años, Núñez de Balboa era un muchacho conflictivo. Su madre había muerto hacía unos años y la relación con su madrastra no era buena. El padre, un hidalgo sin hacienda, acaba por buscarle un empleo al servicio de don Pedro Portocarrero, en Moguer, lo que le servirá para instruirse en el manejo de la espada y será la forja del gran descubridor. En Palos conoce a Colón, un marinero que prepara un viaje hacia las Indias.