Poesía en endecasílabos, de tono épico, crítica con el relativismo imperante.
Mi alma quiere tener las claras rectas
de los desconcertantes arsenales
y en su interior la música compleja
y los sonidos limpios del dieciocho,
la ansiosa melodía inacabable
que vuelve y cambia siempre y cambia y vuelve.
Mis ojos vieron para mi alma el neva,
la plaza del comercio y conde duque,
y para mi alma oyeron mis oídos
total eclipse y una cosa rara,
para mi alma, la inhóspita y abstracta.