Una vez terminada la guerra de Troya, Ulises emprende el regreso a Ítaca donde lo esperan su hijo Telémaco y su fiel esposa Penélope. El viaje se alargará diez interminables años durante los cuales el héroe griego y sus compañeros sufren toda suerte de desventuras. Solo la astucia ayudará a Ulises a llegar sano y salvo a su patria. Desde que Homero contó las andanzas y desventuras de Ulises, el hombre occidental conoce dos expresivas metáforas sobre la vida del hombre y su destino: el viaje y el mar, ese espacio mágico donde todo puede ocurrir.