Perrock Holmes 14. Sabotaje en el parque acuático

Episodio número catorce de la colección “Perrock Holmes”, una serie infantil con mucho suspense, aventuras y grandes dosis de humor e ironía. Los protagonistas son Julia y Diego, investigadores del Mystery Club, acompañados de Perrock, un sabueso que puede detectar sentimientos en los humanos, y del gato doctor Gatson, capaz de hablar con Perrock y sus amos. En el primer episodio, publicado en 2017 y titulado “Dos detectives y medio”, el padre de Julia y la madre de Diego acaban de contraer matrimonio; los dos niños, de edades parecidas, no acaban de llevarse bien, así que los padres les regalan una mascota con el fin de suavizar sus relaciones. Ante el asombro de los niños, el cachorro, rescatado de una perrera, tiene la facultad de comunicarse con ellos y tiene el poder de leer los pensamientos de todo aquel que le rasque la barriga, capacidad que lo convierte en un eminente investigador, travieso y un poco gamberro. 

En este caso, Julia y Diego acaban de ganar un fin de semana en Tenerife con todos los gastos pagados, alojamiento en el hotel Felicidad Tropical y entradas para el parque acuático Siam Park, el mejor del mundo. Al llegar, se encontrarán en el aeropuerto con dos veteranos investigadores del Mystery Club: la señora Fletcher y el detective Marlowe; esta coincidencia les pone sobre aviso y piensan que quizá todas estas invitaciones son un regalo del gobierno canario para promocionar el turismo de las islas. Pero, al día siguiente, en la gran piscina del Siam Park, a varias personas (Julia entre ellas) se les pone la piel de color azul al salir del agua, como si fueran pitufos. Unas horas más tarde, un escorpión azul pica a Diego en el tobillo causándole fuertes dolores. ¿Quién está saboteando sus vacaciones? ¿Es una campaña de desprestigio contra los turistas o un ataque directo a los miembros del Mystery Club?

El autor de la serie es Isaac Palmiola que ha conseguido crear una colección de libros entretenidos,  con una buena dosis de humor e ironía. Como afirman los lectores, el éxito de la serie se basa en el ritmo narrativo ágil y en las situaciones de comicidad absurda. Los textos se completan con las divertidas ilustraciones de Núria Aparicio. Los dibujos, en blanco y negro, representan de forma significativa y con gracia tanto la fisonomía de los personajes como las acciones que se desarrollan a lo largo del relato.