«Sería bueno que la Iglesia, todas las iglesias, volvieran a inspirarse sin miedo en las palabras y la actitud de Jesús hacia las mujeres, asumiendo su visión del mundo». Enzo Bianchi ha repasado con atención algunos textos sagrados para mostrarnos la actitud de Jesús hacia las figuras femeninas que se cruzaron en su vida: mujeres enfermas, extranjeras, adúlteras, que se acercaron y recibieron de él palabras de respeto y aliento.