El 19 de enero de 2004, en la Academia Católica de Baviera en Munich, tuvo lugar un hecho insólito en el mundo actual: uno de los más importantes filósofos vivos, Jürgen Habermas, debatía en público con uno de los principales representantes de la Iglesia Católica, el entonces cardenal Joseph Ratzinger, hoy papa Benedicto XVI.