“Suite francesa” es una magnífica novela escrita en plena II Guerra Mundial en Francia. La autora, Irene Némirovsky, de ascendencia judía, nació en Kiev y se trasladó a vivir a Francia. Se convirtió al catolicismo, igual que su marido. Sus dos hijas fueron bautizadas también nada más nacer. Pero los padres fueron detenidos y enviados a un campo de concentración, en diferentes momentos y lugares. Y murieron, como tantos otros judíos, a manos de los nazis.