La literatura y, en especial, la novela es un género artístico de primera magnitud pues en ella, como en toda obra de arte, el autor refleja la vida y las obras de Dios y de los hombres con tal belleza y profundidad que el lector se siente trasportado a vivir esa misma realidad descrita y notar cómo sus reacciones se desencadenan infinitamente para producir una especial paz y gozo y otras pasiones, dependiendo del género literario y de la intencionalidad del autor y de las circunstancias y formación del lector, en especial de su categoría espiritual.