Hoy he cogido un tren
Hoy he cogido un tren. Un tren de verdad, físico, como los que mi sobrino ve en todas partes, y como podéis intuir, los adora hasta límites insospechados. El tren iba dirección Zúrich, pasando por Steinhausen, Knoau, y tantos otros pueblos, de nombres impronunciables, y entre unos paisajes blancos que me rodeaban a derecha e izquierda. Hoy he cogido un tren y he querido que no terminara nunca.