La lectura de este interesantísimo trabajo, me ha recordado a las durísimas situaciones que tuvieron que atravesar los cristianos mozárabes de Córdoba cuando en pleno esplendor del califato omeya en Al-Ándalus, en pleno siglo IX, veían como sus hijos primero, y luego sus amigos y familiares, se iban convirtiendo al Islam poco a poco, es decir, prescindiendo de la fe tradicional de siglos, el habla y la cultura latina, subsumida por la poesía, la música y los placeres de la vida que regalaba el paso al islam y, finalmente, la mejora en la situación económica y social.